DESCARGAR: Ejercicios de logartimos y ecuaciones logarítmicas
HISTORIA DE LA CIENCIA
John Napier de Merchiston (Neper), ideó un método de cálculo mediante logaritmos que agilizaba notablemente los procesos matemáticos complejos, especialmente en astronomía, geodesia, navegación marítima y otras ramas de la ciencia hasta la llegada de las calculadoras. Lo publicó 1614, en su libro titulado Mirifici Logarithmorum Canonis Descriptio.
Tuvo mucha acogida entre los científicos
de su época. Esta frase es, parece ser, de Pierre-Simon Laplace: “Con la
reducción del trabajo de varios meses de cálculo a unos pocos días, el invento
de los logaritmos parece haber duplicado la vida de los astrónomos”
Napier llamó «números artificiales» a los logaritmos y «números
naturales» a los antilogaritmos. Ideó la palabra logaritmo como la unión de los
vocablos: λόγος (logos) como proporción, y ἀριθμός (arithmos)
significado número, y se podría traducir como «un número que indica una
relación o proporción».
En su vida, Napier mostró gran interés en la
búsqueda de sistemas para ahorrar trabajo de cálculo. Escribió su primer
tratado, en la década de 1570 en el que muestra diversos métodos eficientes de
cálculo, describe notaciones más sencillas e investiga acerca de las raíces
imaginarias de ecuaciones. El trabajo no fue publicado sino hasta 1838, cuando
estas ideas ya habían sido superadas por otros matemáticos.
Otra contribución
destacada de Napier es la utilización de la notación decimal actual. Gracias a
la difusión de su obra por Europa, en la que se utilizaba la coma para
separar la parte entera de la decimal en un número, esta notación se volvió
popular. Si bien no fue él quien la creó, sí fue el responsable de que se
popularizara.
Napier diseñó tres
aparatos para facilitar cálculos, descritos en su obra de 1617 Rabdologiae.
Si bien el más famoso es su “ábaco neperiano”; puede
considerarse a su promptuario como una de las primeras
máquinas de cálculo de la historia.
Nació
en Edimburgo (Escocia) el 1 de febrero de 1550. A los
13 años comienzo sus estudios en la Universidad de Saint Andrews, en Fife.
Permaneció allí menos de un año. Viajó para completar su formación por Países
bajos, Francia e Italia.
Falleció
el 4 de abril de 1617 (67 años) y está enterrado en la Catedral de
Edimburgo.